Segundo dia: el accidentado despertar

-Daiki-

-¡Si! Espero que te guste.

Le tomo la mano me apoyo en su hombro. Bajo un poco la voz.

-Es que te quiero y estoy muy feliz de que estes bien...

Levanto la cabeza y lo miro.

-Aleister se quedo durmiendo en la habitacion... ¿Crees que debería despertarlo? Seria algo raro despertarse solo ¿Verdad?

-Daiki-

-¡Es un amigo! Lo encontre saliendo con mucha comida de la cocina... Y pues esque pasaron muchas cosas extrañas y el se quedo muy cansado y yo le dije q podia descansar en la habitacion y apenas llego se tiro alli a dormir.

-Daiki-

-¡Nose! Creo que ha sido bastaaante.

Le sonrio y miro su katana.

-oh... ¿Puedo veeer?

Tmola Katana de entre sus manos.

-Daiki-

Le sonrío tiernamente.

-Gracias...

La tomo cuidadosamente y me siento en el suelo.

-Que linda...

La acaricio con mis dedos e intento desenvainarla.

-Ne, Yami ¿Como te sientes? ¿Ya estas bien?

Al seguir intentando siento cortarme un poco.

-Ow...

Miro mi mano y veo que comienzo a sangrar.
Me dan nauseas... Los recuerdos de lo que pasó en la cocina vienen a mi... Nunca en mi vida había visto algo así, me siento tan mal...
Me balanceo casi cayendome a un costado pero logro sostenerme con mi mano.

Que horror... Tambien comienzo a extrañar mi casa... Me siento tan mal y han pasado dos días y aun no he sabido nada...
Termino recostandome en el suelo. Siento que se me van mis fuerzas y no aguanto mi malestar ni mi dolor....
Y aunque deseo no quiero llorar ahora, solo me gustaría dejar de pensar.
ag aaaaaaaaaaaag
Que malo...

Abrazo la katana con mis manos.

-Daiki-

Dejo la Katana suavemente en el suelo.
A Aleister parece importarle mucho, por eso intento tener el mayor cuidado...

Mmm...

Voy medio arrastrandome por el suelo hasta la cama de Yami. Es la que tengo más cerca, necesito acostarme.

Al intentar subirme veo que allí está mi perezoso...
Intento tomarlo. A pesar de sentirme tan mal quiero poner como prioridad dárselo q Yami...
En verdad nunca sentí que él se sintiera bien conmigo a su lado, pero si me ha vendado la mano debo importarle ¿Verdad?...
Quiero que Yami lo vea, en verdad quiero que lo tenga, quiero que le guste...
En verdad soy muy débil pero me esforzaré...

Lo tomo entre mis brazos y volteo intentándo alcanzarselo a Yami.
A pesar de todo doy mi mayor esfuerzo por sonreir.

-Yami... Para tí...

Solo espero lo tome rápido y acostarme...
Estaré bien si puedo pensar en algo más...
¡Koalas! Koalas... Koalas...

-Daiki-

Estoy feliz. Soy taaaaaaan feliiiiiiiiiiiiiiiz.
Sonrío todo lo más que puedo.
Hasta debo reírme un poco.
Me siento tan bien ahora...

Me recuesto en su cama y me quedo mirándolo.

-Estoy bien, ya me siento mejor.

Simplemente no puedo dejar de sonreir. ¡Me alegra tanto que le haya gustado!

¡Lo único que queda es que lea mi carta!.

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-Rizumu-

Maldición esta escuea es taaaaaaaaaaaaaan aburrida......

Ya se hace tarde asique me quedo en mi habitación.
Detesto que todo sea así, cómo desearia algo apra hacer...
Mis ojos lagrimean y no tengo nada más en qué pensar...