Segundo dia: el accidentado despertar

Katzel

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El frío de la madrugada aún helaba mi rostro cuando me dispuse a despertar a mis pupilos en sus habitaciones.

De hecho iba a empezar por Rizumu.

Ya le habia echado el ojo el dia anterior y a mi no me gusta quedarme con las ganas.

Así que ingreso sin hacer ruido, aprieto las muñecas de Rizumu contra la cama y le doy un beso superlargo para levantarlo.

Del uno al diez le doy un ocho a sus labios.

Son muy provocativos.

Abre los ojos asustado...

Me pregunto que ira a hacer...

-Rizumu-

.....
.............

Apenas me doy cuenta de lo que en verdad está pasando, instintivamente lucho por liberar mis muñecas.
Intento correrme hacia atrás, pero la cama me lo impide.

Me desespero. Por más que utilizo todas mis fuerzas no puedo quitármelo de encima.

Pensé que si me alejaba de casa podría curarme pero...
¡Me odio! ¡Me odio! ¡Me maldigo!...
¿Porqué...? ¿Qué es lo que tengo yo?...

Giro mi cabeza hacia el costado. Apenas puedo respirar. Tengo la voz paralizada y por mas que intento hablar, solo se me ahogan las palabras.

-Por... Favor...

No pude pelear más.
Dejo mis manos caer en las sábanas, y las lágrimas salen, mojando mis mejillas.

Lo odio, pero no puedo hacer nada... Más que esperar.
Nadie va a salvarme... Tampoco ahora...

Katzel

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Realmente no puede hacer nada...

Mi intuición explora por completo su psique y sólo encuentra una terrible soledad y un profundo trauma.

Parece que esta situación le es familiar.

Y cede colocando la cabeza de costado y rogando.

Qué trágico yo sólo le estoy dando el beso de los buenos días, si quisiera violarlo lo hubiera hecho anoche y no habríamos parado hasta hoy.

Beso su lágrima subiendo hasta el ojo y le aparto los cabellos de la cara.

Dios que es hermoso... tan hermoso...

- No te haré nada - le digo tranquilizándolo - ... deja de llorar, tu fragilidad es mucho peor que tu inocencia sabes... no importa que te haya sucedido en el pasado, aquí, en Maho no te violaré... si te seduciré... es decir que si tú y yo llegamos a tener algo será por que una sonrisa ilumine tu rostro cuando te tenga en mi cama...

Pego una carcajada por que bien sé que me teme y me odia.

Así son los niñitos malos, y no me interesa su sus sentimientos cambian.

- ¡Onichan!

Ayase se acaba de levantar.

Hace un resplandor con el dedo para cegarme y llevarse a Rizumu a su cama.

Envuelvo el cuarto con mis sombras.

- Buen intento... pero no es necesario. Sólo venía a despertaros y a convocaros al aula de nuestro pabellón para la clase de Yatsune Sensei... espero verlos ahí en cinco minutos, cuidado con faltar o irse de pinta, yo soy el encargado de vosotros. En la tarde veremos el avance de sus flores...

-Rizumu-

Si Katzel-sensei no fuera un profesor ya me habria valabzado sobre le para matarlo a golpes.
Estoy enfadado, ¡¿Quién rayos se cree?!
Sere feliz el día en que se muera.

Me levanto bruscamente, me preparo con lo primero que veo y me voy dando un fuerte portaso.

Si él espera que yo quiera para tener sexo, que espere sentado, ya que NUNCA pienso ni acercarme a el por voluntad propia.
Es un idiota, se da tantos aires y no tiene algo con lo que presumir.
No entiendo porque parece creese mejor que los demas, ¡Que estúpido!.

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-Daiki-

Me levanto temprano y le doy los buenos días a mi planta.

-¡¡Buenos diiiiiiiiiiiiiiiiiaaaaaaas!!

Pienso que le quedaría bien el nombre Riku, asique se lo dejo.
Miro la flor de Yami.
Sonrio mientras pienso que debería llamarse Chibi-Yami, porque es mas pequeña, pero igual de hermosa que su cuidador.
La acaricio suavemente y me despido de Riku y Koala-chan tambien.
Me preparo rápido y salgo corriendo.

Me dirijo al vivero, con una hoja y un lápiz.
Me agacho frente a unas flores e intento dibujarlas.
Nose dibujar, pero voy a esforzarme mucho.
Es para un último detalle que necesito.
¡Es sorpresa!

No pude dormir en toda la noche, maldita oscuridad. Despertare a Yami para saber como se siente, pero esperare a que Katzel venga por él.

-Otra vez, seguro que desea que le devuelva su manta, ¿no es así, Tatsumi sensei?

-Vine por el alumno Yami……

-No dejare que se retire con otra persona que no sea Katzel, él es el encargado.

Siento que Yami despierta y le sonrío, me siento a su lado y comienzo a hablarle ignorando a Tatsumi sensei.

-Yami, levántate y ven con……

-He dicho que no saldrá de aquí, si quiere puede esperar.

Vuelvo a dedicar mi atención en Yami, quien responde a todas mis preguntas con monosílabos, hasta que llego al porque hizo lo del día anterior, no insisto en el asunto, pero me acerco a su orejita para susurrarle.

-Cierra tus ojos, te quitare la venda.

Retiro la venda y en su lugar coloco un parche como el de un pirata, solo espero que no me mate por el detalle q tiene bordado.

Me encojo los hombros cuando salgo sin hacerle caso a Ayase.

Caterva de ukes escandalosos, me dan dolor de cabeza, prefiero pensar en las suaves piernas de Tsuzuki chan... él si que está cerca de mis manitas malvadas y perversas.

Entro al cuarto de Daiki y le veo hablando con la planta de yami.

Genial, casi olvido que les han puesto a todos aquí por que tienen un papel particular en la mente maestra del director y claro, los usare para mis fines... pero se ven tan.. tan...

- Deben ir a clase de Yatsune sensei - le digo no muy animado.

Ahí va un especimen que no me da ganas ni de mirar, Daiki es demasiado infantil para mi gusto.

Me alejo del batallón problema con ganas de un black velvet, un cigarrillo y un uke en la cama.

Pero debo pasar por el centro de Curación a recoger un niño infestado por un demonio para que vaya a clases.

Tatsumi ya está allí.

Idiota... ese idiota me quiere poner de malas... ahora de que va...

- Buenos días Tatsumi...

Me interpongo entre él y Matsu-ko

- Buenos dias Yamazaki

- Y que trae al secretario del director por aquí... querias acaso encontrarme para que te haga lo que empezamos ayer... para eso puedes ir a mi cuarto sabes... no hay necesidad de sensacionalismos...

Si pudiera levantaria el brazo y me pulverizaria ahi mismo.

- Vengo por el alumno Yami.

- Yami no se va contigo...

- Pero es una orden de...

- ¡A la m... la orden! he dicho que no se va contigo y no se va... que venga uno de sus payasos a arrebatarmelo... no os metereis conmigo sin que os demuestre quien soy yo en serio...

Parpadea algo nervioso.

Agarro su mugrienta manta y se la tiro por la cara.

- Espero no verte merodeando por mi zona, Tatsumi y menos cerca de Matsu ko

Me da la espalda y se va mascullando algo entre dientes.

Sigue siendo un idiota.

Ahora que ando delante de Yami veo aquello que le ha colocado Matsu-ko y estoy a punto de soltarme la carcajada... contrasta tanto con su forma de ser que... que... jojo...

- Bienvenidos al carnaval - susurro - Hey tu si puedes gruñir monosilabos puedes ir a clase de Yatsune chan... asi que andando...

¡Termineéééééé!
¡Terminé terminé terminéééééé!

Me levanto y ¡Salto salto!
Terminé mi dibujo, solo me faltan unas últimas cosas.
Vuelvo corriendo a mi habitación, y tomo de entre mis peluches un perezoso.
Lo coloco en la cama de Yami y comienzo a escribir mi nota.

En un papel doblado en dos, del lado de afuera escribo: ¡Para Yami! (corazón)

Adentro pongo:
¡Felicidades por recuperarte!
¡Estoy muuuuuuuuuy feliz de que ya estes bien! Me preocupaste mucho y estoy contento muy contento, de que además hayas querido ser mi amigo ¡Si!.
¡No me separare nunca nunca de ti! ¡Soy taaaaaaaan feliiiiiiiiiz!

¡Nos vemos! (corazón)

Dai-chan

Pongo la carta entre los brazos del perezoso y me doy cuenta que ya se me hizo tarde para la clase.
Um... ¡Siempre llego tarde a todos lados!

Daiki aún no ha llegado y seguramente se demorará aún más.

Es un muchacho raro...

Demasiado feliz...

Me pregunto de qué estará hecho, justo estoy saliendo al lado de Yami y lo veo venir saltando con florecitas y brillitos alrededor.

- Todo tuyo

Le digo a Yami y lo dejo para que Daiki haga de él lo que quiera.

- Pero no os tardéis demasiado, Yatsune sensei no puede esperar por cada uno de vosotros.

-Daiki-

-¡¡Yaaamiiii!!

Me abalanzo sobre él y no entiendo porque no nos caemos al suelo.
Lo abrazo fuerte ¡Muy fuerte!
¡Tenía tanto miedo! Casi me pongo a llorar otra vez...
Beso su mejilla y luego me alejo un poco para intentar reanimarme, pensando en otra cosa.
Y ahi me acuerdo que estoy tarde, asi que tomo su mano.
Saludo a Katzel-Sensei con un movimiento de mano y una sonrisa, y me voy llevando a Yami a la clase.
Ir asi me hace feliz.

Esto es para arreglarnos mientras viene yami n.n
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Creí que Yami ya se encontraba bien... todos lo creímos... Matsu ko se había esforzado mucho en curarlo, sin embargo, apenas da dos pasos el demonio en su interior se expande a lo largo del muro en una silueta incontenible.

No hay otra manera...

Daiki no quiere alejarse de él, si no lo aparto tendré que herirles a ambos.

- ¡Daiki!, ¡apártate!

- ¡Noooo! -

No podia ser amable.

Así que arrojé a Daiki al otro lado de la habitación y agarré a Yami por el cuello.

- "¡Silver Dream!"

Así es... es mi sueño plateado... no me ha quedado de otra que sellarlo momentaneamente... hasta que encontremos el modo de despertarlo.

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Toda una mañana perdida... demonios y mil demonios más coronados.

Los chicos a sus cuartos, los maestros a la junta y todo el personal de control en la puerta de la habitación de Yami como si fuera a despertarse... pero qué incompetencia... incluso se me ha llamado la atención como si fuera yo un tipo de asesino... ¡estaba protegiendo a Yami de sí mismo...! hum, otro dia como este y consideraré en serio ir a otra escuela.

Nadie en el Hall central... mph seguro es el cambio de guardia.

En caso de una emergencia real este lugar se vendría abajo. Sólo hay algo que me interesa saber de aquí... y para eso necesito que ese demonio negro despierte... estoy seguro que él lo ubicara para mi...

Veo a un extraño entrar paso a paso... cansado... parece estar muy agitado... ¿que le sucede? ¿acaso no sabe que está en la academia?...

Se tambalea a punto de caer.

Así que me acerco sin prisa y le hago una seña.

- Disculpe... ¿se encuentra bien? - pregunto a la expectativa de su respuesta.

el pelirrojo que ha caido en mis brazos debe ser un regalo por mis molestias de la mañana... sino no le encuentro sentido... un hombre guapo casi desmayado entre mis brazos es solo el desiginio del destino para que lo haga recuperarse en mi recamara.

Cuando le voy a besar una voz suena a mis espaldas

- ¿esta es la academia Maho?

Giro a ver quien ha sido el importuno que me esta interrumpiendo y veo a un joven realmente guapo.

- Um...

Me gusta su tipo pero de hecho estoy ocupado.

- Si lo es... y si esperas un poco... en un segundo te atendere como se debe...

Sonrio... vaya que si... dos hermosos y jovenes aprendices en mis garras constituyen mi dia de suerte.

Los chicos que salian de las clases se quedaban mudos al ver a un joven tan bonito.

Diablos si que iba a tener un exito endemoniado ... no le dejaban un centimetro sin explorar.

Mi presa se iba lejos sin poderlo remediar ... como era eso de que ya se podia poner en pie... ni modo... ahora con toda esta gente aqui tendre que esperar...

Me acerco al joven nuevo y le digo:

- Ven, iremos a la direccion a ver cual es tu aula

Retrocede un poco, se ve que no le inspiro confianza

Le he soltado apenas un segundo y ya se me ha escapado de las manos... seguro que quiere pasar por lo bajo... quien sera... y como habra llegado...

Antes que pueda dar un paso más le señalo

- Ehhh pelirrojo... ya nos encontraremos mas tarde... asi que no creas que todo se ha terminado aqui...

El me mira y luego me da la espalda escabullendose.

- ¡Pelirrojo! - vuelvo a gritar - ... eres mío... no lo olvides...

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Los chicos me ven pasar con el nuevo estudiante. Tiene una pinta de aristocrata...

Tiembla a mi costado y no se atreve a levantar la cabeza para verme... es tan bello... calculo que su juventud como una flor esta empezando a despertarse es un olor de cerezo que trae... no lo se... es un tipo de calida frescura que me agrada...

Lo estoy mirando fijamente ... y mis ojos dorados no podian dejar de ver su silueta.

- ¿y usted es?

- Yamazaki Katzel - le digo pronunciando mi nombre casi en su oido - para ti Yamazaki sensei

paso mi brazo por su espalda y lo atraigo suavemente mi otra mano está inclinandolo poco a poco mientras bajo.

- ¿Y que problema puedes haber tenido?... no lo imagino...

Estoy literalmente sobre él cuando entra Tsuzuki con unos pliegos en la mano y me mira con cólera.

- ¡Yamazaki!

- n.n ohhhh Tsuzuki chan... estoy dandole un tour a nuestro nuevo discipulo...

- ¡Mph!

- El es tu maestro de magia de defensa... Tsuzuki sensei...

-Daiki-

Salgo de mi habitacion y camino por el pasillo.
Yami me preocupa mucho.
Realmente pense que estaba bien, y no lo se... es todo tan extraño y hace nada q estramos a la escuela.
¡Pero vamos! Debo mantener mi ánimo para poder alegrar a Yami.
Muestro una alegre sonrisa.
Llevo conmigo al pereszoso y la carta.
Como pienso q estara bastante tiempo mal se los llevare.

Pero mientras camino veo de repente un chico llevandose mucha comida y como si intentara escapar.
Bajo rapidamente y le sigo el paso.

-¡Vaya! Si que debes tener mucha hambre si te llevas todo eso. No te habia visto nunca por aqui, aunq solo llevamos dos dias en la escuela, no es que me conosca a todos, solo tengo un amigo pero esta enfermo.

Me alegro y le sonrio mucho.

-¿Como te llamas?